Realmente, nada diferente había sucedido, reunión de amigos, tapitas y una buenísima conversación.
Corazón entonces, “¿Qué?”... “no sé”. “Si que sabes; sabes que palabras dichas y escuchadas desde la conciencia causan un gran efecto; sabes que si eres sincera descubres y reconoces tus miedos, tus deseos, tus necesidades, tu frustración; sabes que si les das su sitio a estas emociones, emergerán limpiando el fondo del alma, que brilla casi todos los días y que también se siente triste”. “¿Y porque se siente triste?”, “porque tiene miedo”.
El miedo no es más que ego, ahí está él para fastidiar, se alía con la mente, y como un disco rayado te repite cosas, se justifica, y hace que no estés atenta, te paraliza, no entras en acción, no cambias lo que quieres cambiar por simple que sea.
Cuando un MAESTRO habla y tú escuchas con el corazón abierto, parece que todo lo que dice va dirigido a ti, te toca algo, a lo mejor solo ha sido una palabra, suficiente para que se produzca la revuelta, que sienta fatal, pero que si la vives, la desgranas, la compartes (gracias Mer), te lleva a regresar al camino, que a partir de ahora estará más iluminado.
Lo mejor, es que en realidad, cualquier cosa depende de uno mismo, puedes hacer lo que quieras, sacar ese barrillo (la mejor opción) o quedarte en las mismas (esto es lo cómodo).
Jamás llagaremos a conocer aquello que tememos; para llegar a conocer algo es menester perderle el miedo, y si tienes miedo a ti mismo, jamás llagarás a conocerte.
ResponderEliminarUnamuno
Hola Aurora.
ResponderEliminarEste verano me leí "Los siete poderes" de Alex Rovira. Muy bueno, como todo lo que escribe. Tomé notas que te copio a continuación sobre el miedo:
- Más que vencer tus miedos, mejor escúchalos y convéncelos. Siempre tendrán algo importante que decirte, pues te hablarán de tus anhelos más profundos.
- Si niegas el miedo, te someterá; pero si lo aceptas, te transformará. El miedo a perder te hace perder. A través del miedo creamos dragones interiores que, sin darnos cuenta, nos limitan. De este modo vivimos una vida llena de restricciones impuestas por nosotros mismos y creemos que eso es lo único que existe. Nuestra más pesada carga no son los retos que nos presenta la vida, sino los monstruos que creamos a través de nuestros miedos, nuestras dudas, inseguridades y limitaciones.
- Ve más allá de tus limitaciones, convence a tus miedos, habla con tus dudas y escucha tus inseguridades. Cuando lo hagas verás que cada reto que aceptes será una elección que te hará crecer y te darás cuenta de que, despejado el temor, el reto se convertirá en una extraordinaria oportunidad.
Son reflexiones que me parecen muy interesantes.
Besos, compi!
"Ni miedo a perder, ni ansias por ganar... ese es el truco para todo" (Montero Glez)
ResponderEliminarMirarse dentro y conocerse de verdad, a veces da miedo...
ResponderEliminarJavier, me copio tus notas en mi Molesquine, muchas gracias por compartirlas. Me voy a pillar el libro de la biblio esta semana, no he leído nada de Rovira y me apetece, así que de nuevo gracias!!!
Eli!, veces ni se trata de perder ni de ganar, hay miedos "a nada", y están ahí, de repente llega alguién que te toca una fibra, dice algo y aparecen, solo te das cuenta tú, lo que pasa es que te has comprometido contigo en caminar por un sendero, no hay marcha atrás, y toca trabajar con ellos, con los miedos digo, ya te contaré, Muaki!!!